Vale, no me agrada mucho el hecho de que sea algo que viene de una multinacional, pues parece que le estoy haciendo publicidad. De hecho, se la estoy haciendo. Aunque bien mirado, ¿qué tiene de malo? La sociedad le da mucho a la multinacional (normalmente, dinero, aunque no sólo eso), y tendemos a pensar que cualquier cosa que ella nos dé es una inversión por su parte, con la intención de que nuestra aportación sea mayor.
Pero en un mercado en el que hay competencia, y éste al menos lo es, ¿qué tiene esto de malo? Es un juego al que yo me presto gustoso. Si tengo que comprar una maquinilla de afeitar, y ante precios y calidades similares, la compraré a la empresa que más me aporte a mí o a la sociedad en general. Y aunque la aportación no sea necesariamente algo material.
En este caso, es un producto cultural, si se puede usar esta expresión. Aquí el anuncio vale muchísimo más que el objeto, y creo que no hay que dejar pasar la ocasión de verlo, reírse y juzgarlo.
Como alguno ya sabe, últimamente, me estoy interesando especialmente por la publicidad. Ya os iré dando el tostón si reincidís y decidís volver por aquí.
Y todo este rollo, diréis, ¿qué tiene que ver con el título? Ved el vídeo y lo sabréis. Una advertencia: haced lo posible por disponer de audio cuando lo veáis. Le sacaréis mucho más partido. Que lo disfrutéis.
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